miércoles, 3 de diciembre de 2008

Nacer o Renacer. Morir o Vivir

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Últimamente pienso mucho en la muerte. Miro a mi alrededor y me da la sensación de que puedo desaparecer en cualquier momento. Soy prescindible, me siento vulnerable y siento como si pudiera morir en cualquier momento, de cualquier forma. No tengo miedo, pero no sé cómo compartir estas sensaciones. Me parece que este mundo es una ilusión y pienso que es increíble que vengamos a él con ciertos acuerdos sobre lo que viviremos en nuestra vida, con esos padres que habremos elegido y con esos hermanos, hermanas... con todas las cosas que nos pueden suceder.

Estos días atrás medito mucho delante del fuego y, aún teniendo una vida que crece en mi vientre, en lo que más pienso es en la muerte... en la muerte y en las vidas de las personas. Es como si conociera a todos los habitantes de este mundo... No sé explicarme bien y es una sensación muy extraña.

Hace dos días, mi madre me explicó que mi hermana, con menos de un mes de vida, tuvo que ser llevada al hospital y allí permaneció tres meses enteros entubada y dentro de una incubadora. Nació con más de 3 Kilos, pero cuando fue ingresada pesaba sólo 700 gramos. Mi madre caminaba como 7 Kms cada día para verla sólo 5 minutos diarios, a través de los cristales; y dejaba a su otro hijo, a mi tete, con la tía más buena de este mundo. Mientras ella me explicaba esto, con la distancia que la caracteriza, apartándose del dolor que le produciría conectar visceralmente con todos sus recuerdos dolorosos, yo no dejaba de preguntarme: "madre mía, pero ¿cómo aguantó esta mujer no poder tocar a su hija, siendo un bebé de meses, no poder abrazarla, darle cobijo, calor, que sintiera su corazón?..." Y también pensaba: "pero... ¿qué tipo de alma, querida hermana, decide emprender ésta vida en una incubadora, lejos de la madre y con la incertidumbre de si va a abandonar este mundo o no? pero ¿eso se acuerda así? , ¿realmente decidimos lo que vamos a aprender y lo que vamos a enseñar?".

A los 3 meses del ingreso del bebé, mi madre vio llorar a una mujer en el hospital que gritaba "¡ha muerto una niña en la sala!". Entonces enloqueció y pensó que era su hija porque vio que faltaba de su pequeña incubadora. Finalmente se tranquilizó al descubrir que la habían llevado a una habitación y que se la darían ese mismo día a cambio de hacer un sacrificio: durante meses debía tener siempre dos biberones en la mano, siempre dispuesta a llenarle el buche porque mi frágil hermanita tenía una hernia maligna que hacía que vomitara todo lo que se llevaba al estómago. Así permaneció meses y meses, haciendo guardia, durmiendo pocas horas y finalmente, el bebé se salvó.

Yo no había nacido. Vine al mundo 7 años después, un mes de noviembre, como ella. Cuando esa niña, se convirtió en una hermosa adolescente de 17 años, cuando había descubierto lo que quería hacer, estaba llena de vida, de amigos y comenzaba a estudiar para trabajar con niños pequeños, que era lo que a ella le gustaba de verdad... Con esa edad fue al médico porque le dolía la garganta y el médico le dijo que tenía una hernia. Mi madre me confesó que cuando mi hermana le dijo lo que el médico le había dicho tuvo un pálpito, intuyó que moriría. Yo que sé... no recuerdo bien, yo tenía 10 años y fui engañada, apartada del proceso de su muerte... como de tantas otras cosas. Ni tan siquera me dejaron despedirme de ella. Con esa edad murió. Con 34 años me lo cuenta mi madre y con esta edad tengo la capacidad para escucharla sin juzgarla.

Curiosamente, el mismo día que, años atrás y siendo un bebé, a mi madre le entregaron a mi hermana con la promesa de su sacrificio para permitirla vivir todos esos años... un 28 de febrero... curiosamente, ese mismo día, 17 años después, ella abandonaba este mundo.

Este hecho insólito me dejó trastocada. ¿Por qué ese día? Y luego, me puse nerviosa, ya no quise seguir escuchando y lloré de nuevo cuando mamá se marchó. Lloré porque no tengo recuerdos. Siendo mi hermana Manoli una de las personas que más me mostró su afecto y su cariño, que compartía risas y que cuidaba de mi, el ser humano que siempre me aceptó tal y como soy... ¿cómo es posible que no tenga recuerdos? Y eso me atormenta un poco porque me gustaría recordarla, me gustaría sentirla y NO LA SIENTO y no se POR QUÉ.

Y en estas... reviso una y otra vez ese episodio de mi vida para continuar sanándolo. Cuando creo que ya está resuelto, aparece un viejo fantasma. Y, sí, me produce impotencia no tener recuerdos y me produce dolor pensar que la efectiva castración de sentimientos, de identidad y de expresión que viví en la infancia hizo su efecto, y muy bien.

Hoy... llevo dentro una criatura muy deseada y este nuevo estado, me está permitiendo pensar en la muerte. Imagino que debo volver a ello porque lo que traigo es vida. Mi estado es muy regresivo porque quisiera estar envuelta en líquido, muy calentita y sin el menor ruido, lejos de mi mente, de mi sistema cognitivo, de mi entendimiento., de mis deseos.. Por eso me encierro en casa. Me toco la tripa una y otra vez y siento que ese ser que se está formando respeta mi necesidad de volver a la muerte.

Doy gracias por haber vivido todas las experiencias que, aunque duras, han hecho y hacen que siga caminando como deseo y en la forma que quiero.

Te doy gracias, Manoli, por haber existido y haberme dejado el regalo de aprender con tu pérdida... pero, joder, ¡qué jodidamente jodido se hace no poder recordarte sintiéndote, oliéndote como solía hacer! ¡Qué ostias me pasa joder! Es como si nunca hubiera existido y se me hace difícil de encajar porque hace tiempo que tengo esa sensación.

Te quiero siempre hermana.

Soy mujer, soy madre.

Inés.

10 comentarios:

  1. no existen palabras ante tanto cariño y sinceridad, todo cuanto has escrito es... no sabría definirlo, pero es muy emotivo y profundo. Se que ese cariño que añoras y ese gran vacío que sientes nunca podrá ser ocupado por nada ni nadie, pero espero que ese pequeño ser que va creciendo dentro de ti te colme de cariño, alegría y felicidad y que jamás apartes de tu recuerdo a tu querida hermana, pq ella siempre te cuidará...

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  2. No es cierto lo que dices, claro que sientes a tu hermana, de lo contrario no habrías escrito este testimonio impresionante. De verdad hacía mucho tiempo que no me emocionaba leyendo y tú, Inés, lo has conseguido con creces.
    Mi más sincera enhorabuena por tu valentía, por tu sinceridad y por ese hijo que llevas en tus entrañas. Cuando nazca, solo habrá lugar para la palabra VIDA. Te lo digo por experiencia propia.

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  3. Como decirte que estas llena de vida y de sinceridad. Este texto son más que letras y en él existe un sentimiento muy profundo de enraizamiento con la vida y la muerte.
    La muerte de tu hermana esta conectada con la muerte que ya ha experimentado el nuevo ser que traes a esta vida, por lo que te lleva a una experiencia existencial de todos los seres vivos "muerte-vida, vida-muerte".
    No he conocido a tu hermana fisicamente pero puedo decirte que la he experimentado en otros parametros existenciales, y siempre he sabido que una parte de ella ha estado a tu lado apoyandote y amandote. La perdida de tu hermana en este plano la hizo revivir en otro y esa fue su experiencia "queramos o no", todos elegimos nuestra experiencia "aunque no lo parezca".
    Desde el plano existencial de tu hermana hay una parte de ella que quiere estar contigo y siento que ha puesto su granito de arena en el nuevo ser que estas trayendo. La conciencia o espiritu es multidimensional y puede estar en multitud de planos a la misma vez "de nuestro espacio-tiempo", y siento que una parte de la que fue tu hermana esta inmersa en la nueva vida.
    Que más decirte Inés; que te Amo y que esta experiencia la comparto a tu lado, sitiendo todo lo que me permito y MÁS.
    Eres una MUSIUA con gran endereza "te lo tienes que creer".

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  4. Wow Inés! Yo también me he emocionado mucho con tu escrito. Gracias por compartirlo. Que fuerte pensar en los destinos tan marcados que nos tiene reservada la vida a veces.No dejo de sorprenderme.
    También estoy convencida de que,aunque te falten recuerdos, de alguna manera tu hermana sigue estando contigo.
    Sigue caminando con tanta fuerza. Eres muy valiente.A pesar de la distancia estoy para lo que necesites.
    Te mando un abrazo muy grande.

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  5. Hace unos días ocurrió un suceso que me dejó meditando sobre la muerte.
    Entró un pajarito en casa, la que fué tu casa durante mucho tiempo, volaba de un lado a otro de manera inquieta, le abrí la puerta de la terraza y todas las ventanas, pero al parecer no quería irse. De vez en cuando se cuela algún pájaro a saludarme y después se vá o le ayudo a irse, pero éste insistía en quedarse, como si sintiese que un peligro fuera le acechase.
    Tenia que irme y no quería dejarle sólo en casa, en compañía de mi gato, temía por su integridad, así que después de varios intentos, conseguí atraparlo, no parecía enfermo, y curiosamente se quedó tranquilo cuando lo acurruqué delicadamente en mis manos, se dejó acariciar hasta el punto que me permitió hacerle unas fotos.
    Tras haber disfrutado un buen rato de su compañía, hice lo que creí más conveniente para él, salí a la terraza y le dejé volar libre, como debía estar, le ví perderse entre los árboles y una sonrisa se dibujó en mi cara.
    Salí de casa y al volver al cabo de un rato, y muy cerca de ella, algo en el suelo me llamó la atención, al acercarme ví a mi pajarito muerto, atropellado por un coche. Me quedé un instante mirando en silencio. Al llegar a casa lloré.
    Seguramente mi pajarito sin nombre debió percibir su final e intentó refugiarse y huir, pero el destino es así y ese día debía irse.
    Tu hermana luchó para venir a este mundo, vivió sus experiencias y se fue. Tú estás ahora en el proceso de traer una vida nueva, y el proceso de la vida está íntimamente ligada al proceso de la muerte, es posible que la vida que viene te enseñe a comprender la vida que se fue.
    Mientras tanto, vive tu proceso con mucho amor.

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  6. Gracias a tod@s por vuestro apoyo y por vuestras palabras. No sabéis el bien que me hacéis y el que os hacéis a vosotros mismos por el simple hecho de compartir y de expresar. Os quiero mucho.

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  7. Hola Inés
    Hace 20 años murió mi hermana Raquel en un accidente de tráfico. Ella estaba en la flor de la vida y tenía solamente 16 años. Yo era la hermanita pequeña y tenía 12 . Raquel y yo estábamos muy unidas y aún hoy no puedo hablar de ella sin emocionarme.
    Dices que no te acuerdas de ella, y sinceramente, con el tiempo ,parece que los recuerdos se van borrando e incluso las imágenes de aquellos momentos entrañables que vivimos juntas. Lo cierto es que es duro, porque no quieres jamás olvidar, si lo haces es como si perdieras un poco más a esa persona que tanto amaste, que aún sigues amando.
    Lo cierto es que hay algo que jamás se te olvidará y es lo que sientes , y tu sabes que hubo momentos felices en tu vida que compartiste con una persona maravillosa y que jamás podrás volver a repetir. Eso es realmente lo que duele, pero sin embargo es lo que la mantiene viva en tu corazón. No la has olvidado y jamás mientras vivas lo harás, y por esa la echas de menos, porque lo que jamás te podrán arrebatar es el amor tan grande que sentiste y aún sientes por tu querida hermana.
    Curiosamente la vida da muchas vueltas.
    Siempre pensé después de la muerte de mi hermana, que lo peor que le puede pasar a alguien es la muerte de un ser querido. Pensaba para mi misma, no se lo deseo ni a mi peor enemigo ... Sin embargo , la historia se volvió a repetir, y le pasó a una de las personas que más quiero en este mundo.
    Cristina, perdió a su hermano Robert. Jamás olvidaré ese día !!!. Pensé que la vida era injusta y que la historia no se podía repetir , y menos con Cristina ...
    20 años después , me enfrento al mismo dilema. Hace 2 meses escasos falleció mi hermano Javi con solamente 41 años ( deja esposa y dos niños pequeños ), pero también unos padres y 3 hermanas que se enfrentan por segunda vez en su vida a la misma desgracia.
    Sinceramente, me pregunto porque la vida ha sido tan injusta con mi familia y con las personas que más quiero. Me siento estafada y derrotada, y creo que todos estos palos están forjando en mí unas debilidades tan grandes, que hacen que no pueda enfrentarme a la vida con la suficiente entereza .
    Sinceramente estoy destrozada, y conforme pasa el tiempo es peor , porque me doy cuenta de que realmente ya he perdido a 2 hermanos...

    Mira Inés, mi desgracia no es peor a la tuya, solo espero que tengas razón, y si algún día siento la vida en mi interior, me haga ser más fuerte y me de la suficiente esperanza para enfrentarme un día más a este vida y comenzar a ser verdaderamente Feliz.

    A mis queridos hermanos Raquel y Javi, siempre estaréis en mi corazón

    Cristina, te quiero mucho

    Esther

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  8. Esther, no tengo palabras de consuelo. Aquí, hoy, igual no te sirve eso de "las cosas suceden porque tienen que suceder" y "tu hermano se ha marchado porque en otro nivel de conciencia así lo ha decidido". Sé que eso ahora no te sirve, pero sé que con el tiempo, cuando puedas verte a ti misma en este mundo ilusorio, caminando con ese cuerpo físico que la vida te ha dado para moverte en esta percepción, para sentir y vivir experiencias... cuando puedas verlo todo con un poco más de distancia, entonces no experimentarás tanto sufrimiento. Tu experiencia es muy, muy dura, pero tu renacer... no te quiero decir como va a ser tu RENACER. Seguramente no volverás a ser la misma JAMÁS. Seguramente, el destino te tiene una gran aventura preparada. Ábrete a ella y no tengas ningún temor. Los peores temores se han cumplido ya, así que abre los brazos a lo nuevo que ambas sabemos que nuestros hermanos, nuestros seres queridos que ya no están aquí, de alguna forma están a nuestro lado, como ángeles. Tienes todo mi apoyo desde la distancia para ser lo que tu quieras ser. No tires la toalla.
    Un fuerte abrazo, mujer guerrera.

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  9. Hola, Esther! Soy Juanvi, el compañero de Inés. He leído tu comentario y con tu permiso te escribo estas letras, que no pretenden llenar tu vacío, pero hay las dejo escritas para tí.
    Lo que más me ha impactado y me ha llegado profundamente son estas frases:
    -Sinceramente, me pregunto porque la vida ha sido tan injusta con mi familia y con las personas que más quiero
    - Me siento estafada y derrotada, y creo que todos estos palos están forjando en mí unas debilidades tan grandes, que hacen que no pueda enfrentarme a la vida con la suficiente entereza
    A mis queridos hermanos Raquel y Javi, siempre estaréis en mi corazón
    Realmente toda esta experiencia que estas viviendo tiene que tener un fin para contigo misma, y por nada en el Mundo, creo que sea para que te derrotes. La vida Esther, no es injusta con nadie, simplemente es. Las situaciones que vivimos, son las que según nuestro criterio, definimos como injustas. El perder a seres queridos siempre es doloroso y hay que hacer el duelo de esa perdida, pero otra cosa muy diferente es cuanto tiempo quiere arrastrar uno mismo ese dolor. Piensa que mucha gente arrastra ese dolor toda su vida y al final, la vida para esa persona se convierte esencialmente en dolor. No siento que tú quieras que tu vida se convierta solamente en eso. Otra cosa muy diferente es el recuerdo de esas personas, y aquí ya depende de la relación que hayas tenido con ellas y si te has dejado expresar tus sentimientos con ellos, en el transcurso de la vida. Cuando uno no se ha permitido ser quien le gustaría ser con un ser querido y este se va, es cuando queda ese sentir de dolor y de vacío.
    Estos seres queridos que has perdido, estén donde estén, seguro que te están enviando energía para que superes esta etapa de tu vida y aprendas “porque seguro que algo te esta enseñando toda esta experiencia, relativa a la muerte”.
    Y como muy bien, sabes siempre estarán en tu corazón y en tus sueños y en tus pensamientos “pero desde el amor y no desde el dolor”. Ellos vivieron sus vidas y creo que lo hicieron lo mejor que pudieron, y también eligieron su fin aunque ni ellos mismos lo supieran, al igual que nosotros también elegiremos nuestro fin, aunque muchos no lo sepan.
    Estas palabras te las escribo porque me guió mucho por la intuición y al leer este texto me ha llegado algo referente a tu persona y a lo que estas viviendo.
    Humildemente te he escrito estas letras y también te digo que aquí estoy para cuando necesites a una persona que te escuche y que te apoye.
    Besos guerrera.
    De un Amigo.

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  10. Gracias a los 2 por vuestros comentarios de apoyo. Cuando compartes tus experiencias con alguien que las conoce desde cerca , te sientes más apoyada y comprendida.

    Quizás en vuestros caminos , habéis dado un paso más que yo, y sabéis enfrentar las situaciones con mayor entereza y razocionalizar los sentimientos para que estos no sean más fuertes que tu propia persona.

    Gracias de nuevo, espero tener la entereza suficiente para empezar a ver las cosas de otro color ... nadie dijo que el camino fuera fácil, pero sin duda , vale la pena

    Esther

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